Interesantísima jornada sobre la investigación en el campo de la anorexia nerviosa, organizada dentro de los Cursos de Verano 2022 de UNED Tudela
Los asistentes han podido conocer los últimos avances de los estudios realizados y su aplicación clínica
La anorexia nerviosa es un asunto enormemente preocupante para todos los profesionales de la salud mental porque plantea un reto para el que desgraciadamente todavía no se ha encontrado solución, ya que existe un abanico muy amplio de potenciales factores psico-biológicos desencadenantes. La alimentación es una necesidad básica para la supervivencia de los seres humanos y puede suponer una actividad muy placentera, pero los complejos mecanismos que la sustentan pueden verse alterados, generando importantes trastornos. Este tipo de trastorno afecta principalmente a las adolescentes entre 12 y 18 años, aunque también puede darse en varones; se estima que la padecen una de cada cien adolescentes, un dato escalofriante. Si además tenemos en cuenta que desconocemos su origen exacto y que la enfermedad se cronifica si no se atiende, necesitamos encontrar una solución de manera urgente.
La investigación en el contexto de laboratorio y la práctica clínica nos están ayudando a comprender mejor la relación entre los distintos factores implicados en el desarrollo de esta enfermedad y contribuyen a desarrollar enfoques terapéuticos novedosos, imprescindibles para avanzar en su prevención y tratamiento.
Sobre este tema, el de la “Investigación básica a través de modelos animales y los principios que rigen su bienestar”, ha tratado Ana De Paz Regidor, la primera de los ponentes de esta Jornada, organizada dentro del programa de Cursos de Verano 2022 de UNED Tudela. De Paz es Licenciada en Filosofía y Graduada en Psicología, con Máster en Metodología de las Ciencias del Comportamiento y de la Salud, además de Profesora Tutora e Investigadora en el Laboratorio de Aprendizaje y Conducta Animal de la Facultad de Psicología de la UNED. En sus propias palabras, "Pude estudiar Psicología gracias a las facilidades que ofrece la UNED para compaginar estudios y carrera profesional. Cuando conocí el nivel de los proyectos de investigación relacionados con la psicobiología que la UNED estaba llevando a cabo, tuve muy claro que era mi pasión y quería formar parte de ello".
Durante su conferencia ha expuesto las nociones básicas que definen el concepto de anorexia a nivel internacional (sistemas de clasificación DSM-5 (APA) y CIE-II (OMS) y ha explicado los modelos animales que se utilizan en las investigaciones de laboratorio y los criterios de bienestar animal que se aplican en estos casos. En el caso de las investigaciones desarrolladas en el campo de la psicología se utilizan principalmente ratas, ratones y palomas porque sus comportamientos son bastante similares a los de los seres humanos. Poco a poco estos se van sustituyendo por desarrollos de inteligencia artificial, pero todavía seguimos necesitando el trabajo previo en laboratorio.
A continuación hemos podido atender las explicaciones del profesor Ricardo Pellón Suárez de Puga, Catedrático de Psicología Básica en la Facultad de Psicología de la UNED, que nos ha explicado con mayor detalle cómo se desarrollan algunas investigaciones en concreto y uno de los mayores logros obtenidos en el área de conocimiento de la anorexia nerviosa relacionado con la aplicación del papel de los reforzadores como inductores de conducta. Estas son algunas de las conclusiones a las que han llegado a través de sus estudios:
- "La pérdida de peso durante el desarrollo de la anorexia basada en actividad, puede estar más relacionada con el exceso de actividad que con la pérdida de interés por la comida"
- "El programa de comida induce inicialmente carrera, que puede ser mantenida posteriormente por el contacto con el programa de reforzamiento, elevando la tasa de actividad"
- "El correr en sí mismo puede añadir poder reforzante a la situación elevando la temperatura corporal, de manera que el resultado sea un reforzamiento muy poderoso"
La última de las conferencias de esta Jornada sobre anorexia ha sido a cargo de Emilio Gutiérrez García, Catedrático de Personalidad, Evaluación y Tratamientos Psicológicos en la Facultad de Psicología de la Universidad de Santiago de Compostela. Gutiérrez nos ha hablado acerca del panorama actual existente en el diagnóstico, la transferencia de resultados en anorexia a la práctica clínica y los retos que se plantean en el futuro. Para él, el propio proceso de transferencia de conocimiento es una dificultad superior a la de la investigación, la generación del propio conocimiento; emulando a Keynes, ha manifestado que "lo difícil no es adoptar nuevas ideas, sino abandonar las viejas". "Cuando los descubrimientos científicos implican modificaciones necesarias en los hábitos del personal que debe hacer efectivo ese cambio, nos cuesta muchísimo adoptarlos aunque estemos hablando de personas que pertenecen a nuestro mismo ámbito técnico".
Resultan interesantísimas sus investigaciones acerca de los efectos positivos que tiene la utilización del calor en el tratamiento de la anorexia nerviosa. "Contamos con evidencias experimentales cada vez más potentes que refuerzan nuestras teorías, pero todavía no se ha extendido a nivel práctico porque a veces el camino de la evidencia, de la filosofía terapéutica, compite con el de la práctica terapéutica". No obstante, tengo la esperanza de que estos resultados finalmente terminen adoptándose de manera generalizada porque tenemos la evidencia de que funcionan y pueden complementar perfectamente el tratamiento.
"En un futuro confío en que llegaremos a la desaparición de los trastornos de la imagen corporal y que adquirirán mayor relevancia otros aspectos como el de la hiperactividad. Dede mi punto de vista, la anorexia es un problema fundamentalmente médico y no tanto psicológico: de repente algo comienza a funcionar mal a nivel físico. Todavía no sabemos qué es exactamente, de momento lo estamos investigando e intentamos paliarlo, pero lo descubriremos".