Usted es médico. ¿De dónde viene su afición por la escritura?
“Mi afición por la escritura llega antes que la de por la medicina. Desde la adolescencia empecé a leer y a escribir mucho, tenía una afición fuerte; cuando llegó el momento de elegir carrera lo hice un poco presionado. Mi vocación por la medicina no es una vocación tardía, es una vocación que empezó entonces”.
¿Qué proceso lleva a cabo a la hora de escribir?
“Escribo y he escrito ensayo, prosa poética, una novela y poesía; en cada uno de los temas la forma es distinta. En el ensayo necesitas documentarte y eso lleva su proceso; tal vez el tiempo que más se emplea es en recoger biografía y escribir suele ser más sencillo. La novela es muy laboriosa, ya que partes de un argumento que tienes que hacer creíble, entretenido, emocionante… y no es fácil. La poesía es algo distinto, algo mucho más íntimo; tienes que tener un momento especial. Un poema te puede salir en una hora o te puede no salir nunca”.
¿Tiene algún referente?
“Los que tenemos casi todos; Lorca, Antonio Machado, Juan Ramón Jiménez... Fundamentalmente esos son los referentes más próximos”.
¿Por qué motivo decide escribir este poemario?
“Este poemario, en realidad, es una selección de poemas que he escrito estos dos últimos años, y algunos que datan de la adolescencia y de mi juventud. Tratan de ser una muestra de los temas y de los tiempos en que se han escrito”.
¿Qué vamos a encontrar en “El mundo en el que habito”?
“Vamos a encontrar poesía del yo, poesía íntima y personal que trata de transmitir sensaciones; esa es la poesía que más me gusta y que más puede gustar, porque de alguna forma con ella intentamos que el lector se encuentre y se emocione. Casi todos tenemos sensaciones similares: miedos, angustias, amores y desamores...”.
¿Qué otras obras tiene publicadas?
“Tengo publicados dos ensayos, ”Para comprender al enfermo”, del que hubo dos ediciones, y “El paciente terminal y sus vivencias”, que ha tenido una difusión muy importante en Sudamérica y países de habla Hispana. También una serie de relatos cortos “Arraigos, melindres y acedías” y la novela “Las sombras de la luna”, que se publicó el año pasado.
¿Qué supone para usted la escritura?
“Para mi la escritura supone una realización personal. Me gusta estar tiempo escribiendo; crear no me cuesta trabajo, sobre todo con la poesía. Lo más gravoso es repasar y corregir”.
Y ahora, ¿tiene en mente ya un siguiente proyecto?
“Tengo dos cosas empezadas y ya muy avanzadas; un tema sobre salud y felicidad, y un ensayo y una novela que ya veremos…”.